Compañeros, alumnos, amigos y familiares del profesor e investigador de la UCLM Antonio del Cerro, recientemente fallecido, se han congregado en las instalaciones de la ETSIA para rendir un sentido homenaje a la figura de este profesor, para lo que se ha plantado como símbolo un pinus nigra, "un compañero de viaje de excepción",-tal y como ha señalado Francisco Montero, quien ha indicado que esta especie arbórea ha ocupado más de diez años de trabajos, investigaciones, tesis, cátedra o publicaciones del profesor del Cerro.
El director de la Escuela destacó también su obra "como la de un insigne compañero",-indicó, mientras hacía un recorrido por su trayectoria profesional desde que comenzara el 1976 como becario de Formación en ala Escuela de Montes de la Politécnica de Madrid, pasando por la Universidad de Murcia como profesor hasta llegar a la UCLM como catedrático de Escuela Universitaria, para posteriormente ser catedrático de Universidad.
Del Cerro trabajó en distintas y variadas líneas de investigación como: Biomasa forestal, cultivos energéticos, regeneración de especies forestales, reforestación de tierras agrarias, impacto medioambiental en áreas recreativas, índice de Área foliar o Dendrocronología. Igualmente ha participado en multitud de proyectos de investigación, generando equipo de trabajo y de investigación, formando doctores y participando en ellos como uno más.
Francisco Montero ha destacado su labor en distintas tesis doctorales; como responsable de docencia en diferentes planes de estudio; como director de numerosos proyectos fin de carrera o como autor de cinco libros y numerosas publicaciones de artículos en revistas de carácter nacional e internacional. "Una hormiguica que no ha pasado desapercibida",-continuó el profesor Montero, "que ha ido transportando conocimiento, crítica, desarrollo e innovación desde el ámbito forestal a la Universidad, a la Escuela de Agrónomos y a la que desde siempre, le había querido llamar: de Agrónomos y de Montes" -concluyó.
Tras su intervención, también quisieron recordarlo a través de pequeños fragmentos compañeros y alumnos. En este sentido, Antonio Roncero dio lectura al texto elaborado por el representante de los alumnos en el que se le recuerda al profesor del Cerro como "un maestro de la vida". Posteriormente, un sobre recogía todos los escritos depositándolos en el hoyo de la plantación, junto con un libro de la Constitución Española y la edición de El País del 10 de diciembre de 2010, fecha de su fallecimiento.
Tras este gesto, la hermana del profesor descubría una placa en su memoria, en la que se reconoce su labor y trayectoria académica de más de 30 años, así como su pasión y compromiso con la defensa de los bosques y del medio natural. La misma finaliza con estos versos de Miguel Hernández: "…que tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma, compañero".

Gabinete de Comunicación UCLM. Albcete, 21 de diciembre de 2010