La obra de Ludwig Wittgenstein -Viena en 1889-, filósofo de una personalidad fascinante, atormentado por su exigencia de autenticidad, por el trabajo y por la idea de la muerte, es el centro de atención del International Wittgenstein Symposium que se celebra en la Facultad de Ciencias Sociales y Jurídicas, edificio de San Pedro Mártir, en Toledo, del 15 al 17 de septiembre.
Uno de los fenómenos menos estudiados sistemáticamente en los últimos años tiene que ver con el replanteamiento de cuestiones metafísicas en el seno de la tradición analítica. Esto resulta ciertamente paradójico, ya que el origen de la filosofía analítica se centra en una crítica a cualquier postulado metafísico en la nueva brecha que se había marcado la filosofía.
La relación entre filosofía analítica y el idealismo fue un tema relevante al inicio de la obra wittgensteiniana y se concede especial mención en su obra intermedia. El congreso, que está dirigido por el profesor de la Universidad de Castilla-La Mancha Jesús Padilla, se propone arrojar cierta luz sobre los puntos anejos al idealismo.
Así, se analizarán las incertidumbres ligadas a la representación de la percepción inmediata; la experiencia del momento actual; y se analizarán los predicados como “tener un dolor”; el dilema que generan los deícticos; las dificultades que causan los colores, la experiencia y un largo etcétera de temas tratados a lo largo de la obra de Wittgenstein.
En el pensamiento de Wittgenstein pueden distinguirse dos etapas: la primera viene marcada por la publicación del Tractatus logico-philosophicus (1921-1922), en el busca una salida a los problemas no resueltos del positivismo clásico respecto a las matemáticas, la ciencia y la filosofía y la segunda, definida por su obra Investigaciones filosóficas, publicada póstumamente en 1953.
Entre los invitados al congreso se encuentran el Profesor Wilhelm Lütterfelds, de la Universität Passau; Wilhelm Vossenkuhl, de la Universität Manchen; Pirmin Stekeler-Weithofer, de la Universität Leipzig o Hans-Johann Glock, de la universidad de la lectura; mientras que el patrocinio del mismo corre a cargo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, el Ministerio de Educación y Ciencia, la Embajada de Alemania en Madrid, la Alexander von Humbold Stiftung, Bonn (Alemania) y la Ludwig Wittgenstein Gesellschaft, Passau (Alemania).