Analizar la interacción del hombre con la naturaleza en la serranía de Cuenca y sus huellas en el paisaje actual; partiendo de la hipótesis de que en el análisis de esta interacción tradicional se encuentra gran cantidad de usos cargados de valores, actitudes y habilidades de responsabilidad ambiental es el objetivo esencial del curso de verano que la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) celebra estos días en la localidad de Beteta , en plena Serranía Alta de Cuenca.
José Ignacio Albentosa, vicerrector del Campus de Cuenca y Extensión Universitaria de la UCLM, acompañado de la consejera de Medio Ambiente de la Junta de Comunidades, Rosario Arévalo y el director del curso, Joaquín Saúl García Marchante, han inaugurado esta mañana en la localidad de Beteta el curso de verano Paisaje cultural y educación para el desarrollo sostenible en Espacios Naturales Protegidos.
El curso, que tiene como alumnos a estudiantes de Agrónomos, Pedagogía, Trabajo Social o Medio Ambiente, trata de dotarles de las herramientas necesarias para que puedan trasladar a sus futuros “alumnos” la necesidad de entender el doble uso de un espacio natural protegido. Estos lugares tienen por un lado que servir de hábitat a las personas que viven en ellos y, por otro lado ser reserva de una naturaleza cada vez más delicada.
Y es que según Rosario Arévalo “cada día desaparecen 72 especies protegidas, 15.000 especies animales al año y 60.000 vegetales”. Para la consejera es esencial trabajar en la región por ampliar “la red de espacios protegidos y aumentar el número de centros de interpretación y aulas de la naturaleza para que aquello que hemos heredado de nuestros padres lo podamos dejar en perfectas condiciones a nuestros hijos”.
Por su parte, el director del curso, el profesor García Marchante, incidió en el gran interés que tiene “museificar” los espacios naturales protegidos, porque “gracias a los materiales pedagógicos que se generan, se puede transmitir a los visitantes y a los habitantes la gran riqueza y variedad biológica que tienen en sus manos y que pueden disfrutar de forma sostenible”.
A lo largo de estos días, los alumnos del curso podrán aprender a difundir los valores naturales y culturales de este tipo de espacios naturales protegidos, equiparse científicamente y aprender a fomentar el conocimiento de los ecosistemas.
Cuenca, 13 de julio de 2005