La Escuela Politécnica de Albacete ha recibido a los alumnos de bachillerato que compiten por esta provincia en la fase local de la Olimpiada de la Física. Las pruebas, que ya se han realizado en Toledo y Ciudad Real a lo largo de esta semana, finalizarán el martes próximo en Cuenca. Este es el décimo-cuarto año que llega a la región la “Olimpiada Española de Física”, un acontecimiento de carácter educativo, organizado por la Real Sociedad Española de Física, que se celebra en toda España con el fin de incentivar a los alumnos de enseñanzas medias a profundizar en el estudio de esta materia.
Las pruebas van dirigidas a alumnos de primero y segundo de bachillerato LOGSE, quienes compiten, en esta primera fase, junto a compañeros de su misma provincia. El profesor de Física de la Escuela Politécnica Superior de Albacete, Enrique Arribas, coordina las pruebas desde el año 1992 y asegura que “esta Olimpiada es un punto de encuentro para los alumnos, pues coinciden con chicos de su edad y con la misma ilusión por adentrarse en las ciencias y la informática y con aficiones comunes, como el ajedrez”.
Estas pruebas constituyen un auténtico foro de encuentro donde aprender y debatir sobre una materia que quizás pueda convertirse en la vocación laboral de alguno de los participantes. Tal ha sido el caso, según indica el profesor Arribas, de dos participantes de la Olimpiada procedentes de Valdeganga (Albacete) que estudiaron Físicas y, actualmente, trabajan en la Universidad Complutense y en la Universidad de Zaragoza, o de otros dos olímpicos que se encuentran en la Politécnica de Albacete en los departamentos de matemáticas e Informática. Otro de los destinos habituales de los participantes, añadió Enrique Arribas, es la carrera de Telecomunicaciones, unos estudios que requieren puntuaciones elevadas en el bachillerato y a los que pueden acceder alumnos brillantes como los que participan en esta Olimpiada. La prueba se compone de 10 preguntas, 7 son de múltiple respuesta (tipo test) y las otras 3 son más extensas para que los alumnos razonen la contestación.
La última cita de la fase local será el martes 14, en la Escuela de E.G.B de Cuenca. A partir de ahí, los tres estudiantes de toda la región que obtengan una mejor puntuación, realizarán un nuevo examen correspondiente a la Fase Nacional de la Olimpiada, una prueba que se realizará, también en Cuenca, entre el 3 y el 6 de abril y a la que concurrirán, aproximadamente, 150 alumnos de todo el país en representación de varias Universidades españolas. Tras esta prueba se analizarán los resultados y se seleccionará a cinco alumnos que pasarán directamente a la final para competir, en la fase internacional, con los mejores estudiantes de física procedentes de distintas partes del mundo. Mirando la estadística observamos que, en sólo una edición, la de 1994, un alumno de Villamalea llegó a la fase internacional celebrada en China pero, sin irnos tan lejos, el pasado año, en la fase nacional de Burgos, un joven de Ocaña ganó el premio a la mejor resolución del problema experimental.
A pesar de que la finalidad principal de estas pruebas sea la de aumentar el interés de los alumnos hacia la Física, también se quiere incentivar a los jóvenes con una dotación económica que premie su esfuerzo intelectual. De esta forma, en la primera fase, el MEC concede tres premios para los primeros clasificados, que ascienden a 300 euros, para el primero, 200 euros para el segundo y 150 euros para el tercero