El profesor en Filosofía y Letras por la Universidad Complutense de Madrid y personalidad indiscutible en el campo de la Ciencia Histórica Manuel Espadas Burgos ha sido investido hoy doctor Honoris Causa por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), en reconocimiento a su trayectoria universitaria y su contribución a la comunidad historiográfica nacional e internacional a través de su extensa obra.
Más de un centenar de personas han seguido de cerca el acto celebrado en el Paraninfo del Rectorado en el Campus de Ciudad Real que ha presidido el rector de la Universidad de Castilla-La Mancha, Ernesto Martínez Ataz, quien ha destacado del profesor Espadas Burgos su labor científica, profesional y personal, así como su participación activa en la creación de la Universidad regional.
En su intervención, el rector ha agradecido al nuevo doctor su empeño por conseguir que Castilla-La Mancha tuviera Universidad, una tarea, -como en alguna ocasión ha recordado Espadas Burgos y hoy el propio rector-, "difícil", porque "no sólo había que crear por decreto la Universidad, sino que había que provocar la identidad regional, había que cambiar la mentalidad de muchos castellano-manchegos que apenas creían en su tierra y en sus posibilidades".
El proceso, también tomando por prestadas las palabras del homenajeado, fue "lento, generoso y hábil". No en vano, ha dicho el rector, "mereció la pena" ya que ha sido el motor de desarrollo de la Comunidad Autónoma. Fruto de aquella implicación es el hecho de que Manuel Espadas Burgos llegara a ser miembro del Consejo Social de la Universidad regional, gesto que la misma quiso corresponder otorgándole en el año 2001 la Medalla de Oro de la institución y ahora su más alta distinción académica que ya comparte junto a 31 personalidades más.
Pero si Manuel Espadas fue pieza clave para el nacimiento de la institución académica castellano-manchega, el máximo responsable de ésta ha considerado que también él "contribuyó, como nadie, a generar una identidad regional desde los inicios oficiales de la Autonomía" convencido de que "lo que no consigamos nosotros no nos lo va a dar nadie".
En este sentido, ha dicho de a quien ha definido como "manchego de origen y de ejercicio", que siempre "ha llevado con orgullo el nombre de Ciudad Real y de Castilla-La Mancha allende nuestras fronteras, además de sus rasgos sociales, económicos, culturales e históricos", y que ha sido en su última obra cuando ha ahondado en ello y "ha querido dar a conocer esa nueva imagen de la región, tras haber superado la conciencia de olvido y marginación a base de trabajo y de apostar por el desarrollo cultural, científico y tecnológico".
Más allá de estos argumentos que llevan a Manuel Espadas a ingresar en el claustro de doctores de la Universidad regional, a propuesta del Departamento de Historia, y con los apoyos de los departamentos de Geografía y Ordenación del Territorio e Historia y de la Facultad de Letras del Campus de Ciudad Real, el rector ha añadido otros dos más. En primer lugar, su dilatada trayectoria científica e investigadora que le han situado siempre en los escenarios de la historiografía nacional e internacional más privilegiados y le ha llevado a ocupar puestos de responsabilidad como la dirección del Instituto de Historia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la presidencia del Comité Español de Ciencias Históricas, o la dirección de la Escuela Española de Historia y Arqueología y la coordinación institucional del CSIC en Roma; y en segundo término, su humanidad y generosidad hacia los demás.
Por su parte, el profesor Espadas Burgos se ha mostrado abrumado y agradecido por la generosidad y "magnanimidad" que la Universidad de Castilla-La Mancha ha tenido hacia su persona, y ha añadido que la concesión de tan máximo galardón no hace sino exigirle mayor compromiso con ella.
Echando la vista atrás a aquellos años en los que el proyecto de la Universidad de Castilla-La Mancha formaba parte "del mundo de los futuribles", el homenajeado ha asegurado sentirse "orgulloso" de la colaboración que pudo prestar en su creación "convencido de la necesidad y de la oportunidad de conseguir una Universidad que fuese el alma mater de la actividad científica y cultural de Castilla-La Mancha y superase el obligado éxodo de estudiantes a otros distritos universitarios".
Quien hoy está considerado uno de los más prestigiosos historiadores a nivel nacional e internacional ha explicado en su intervención que el propósito de la Historia es investigar y narrar acontecimientos que algún día pertenecieron al mundo real y, sobre todo, comprender al hombre que los protagonizó. En este sentido, ha defendido la labor del historiador que "nunca puede separarse de los hechos" y ha advertido de que la inexistencia de rígidas leyes históricas no puede ser atribuida a la falta de rigor científico de los historiadores, sino a la infinita variedad de los hechos.
Por último, Espadas Burgos ha recordado que en su condición de historiador, independientemente del lugar en el que se encontrara, siempre ha sido "fiel" a sus raíces, a su tierra y a sus hombres.
En este académico de investidura, el profesor Manuel Espadas ha sido apadrinado por los catedráticos de Historia Moderna e Historia Contemporánea de la Facultad de Letras de la Universidad de Castilla-La Mancha, Jerónimo López-Salazar Pérez y Juan Sisinio Pérez Garzón, respectivamente, y por el profesor de Investigación del CSIC José Ramón Urquijo Goita. Asimismo, la laudatio ha sido pronunciada por el profesor titular de Historia Contemporánea de la UCLM y presidente del Ejecutivo autonómico, José María Barreda, quien ha glosado los méritos académicos y las virtudes personales de Espadas Burgos.
Manuel Espadas Burgos ha estado arropado en este día por la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero; familiares, amigos y diversas autoridades públicas. A lo largo del acto ha intervenido la Agrupación Coral Universitaria de Ciudad Real, dirigida por Kim Amps.
Gabinete de Comunicación UCLM. Ciudad Real, 11 de noviembre de 2009