Este miércoles, 18 de enero, a las 18:00 horas, en la Escuela Politécnica Superior de Albacete, el profesor de la Universidad de Londres Anthony Steed, director del centro de excelencia en entornos virtuales y gran experto en temas de gráficos por computador, ofrecerá una charla sobre los últimos desarrollos en sistemas 3D colaborativos; desde los juegos de ordenador a los equipos de gama alta de realidad virtual inmersiva.
La realidad virtual, tecnología que tiene sus orígenes en la década de los sesenta, se ha conocido ampliamente desde los años ochenta a partir del eco que se hicieron la prensa, la televisión y el cine. Sin embargo, a juicio del profesor de la Escuela Politécnica Pascual Molina Massó -que imparte una asignatura sobre realidad virtual-, “la imagen que Hollywood ha vendido de una persona con un extraño casco en la cabeza y una pareja de guantes enfundados, queda lejos de lo que es la Realidad Virtual, representada a día de hoy por modernos simuladores de vuelo o los últimos títulos de videojuegos 3D, apoyados en grandes avances en imagen y sonido que sumergen a la persona en un mundo tridimensional en el que se entrena o se divierte”.
El profesor indica que el avance de las comunicaciones, en especial Internet, hace posible a personas que se encuentran en lugares distantes, poder participar en esa Realidad Virtual, que es lo que se conoce como telepresencia. También especifica que el hecho de encontrarse y colaborar en un mundo virtual no es igual que en el mundo real, pues igual que esta tecnología nos proporciona superpoderes también tiene sus limitaciones. “En el mundo virtual podemos volar si queremos, pero algo tan cotidiano como comunicarse no verbalmente mediante expresiones faciales o dar un buen apretón de manos no es nada sencillo”, asegura.
La conferencia abordará el problema de la colaboración entre personas en esos mundos virtuales, ya sea para entrenarse o para divertirse, y también tratará sus beneficios y sus problemas, así como las expectativas de futuro de esta tecnología.
GABINETE COMUNICACIÓN UCLM. Albacete, 16 de enero de 2006