A partir de estos modelos, que contienen la información básica imprescindible, es posible construir de forma automatizada toda la aplicación sin tener que escribir todos los detalles. Esta revolucionaria propuesta permite eliminar muchos de los procesos más laboriosos del desarrollo de software, pues son las máquinas las que producen el código a partir de las instrucciones que contienen los modelos.
De esta manera se consiguen ahorrar muchos esfuerzos y reducir los costes de producción, a la vez que se puede controlar y aumentar la calidad de los productos desarrollados. Actualmente grandes empresas y organizaciones internacionales, como la NASA o AT&T han comenzado a utilizar estas técnicas con éxito como una alternativa muy válida para construir sus sistemas, y empiezan también a ser usadas en España.