El Paraninfo del Campus Universitario de Albacete ha sido escenario, esta mañana, del acto de presentación del proyecto del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha, un espacio natural que constituirá una pieza clave en la conservación, el estudio y la divulgación de las especies vegetales de la región y de otras procedentes de distintas partes del mundo.
Al acto han asistido el rector de la Universidad Regional, Luis Arroyo, el director de la Escuela de Ingenieros Agrónomos de Albacete, Francisco Montero, el director de la Oficina de Gestión e infraestructuras de la UCLM, Diego Peris, el alcalde de la ciudad, Manuel Pérez Castell, el consejero de Ciencia y Tecnología, Isidro Hernández Perlines y el presidente de la Asociación Española de Jardines Botánicos, Esteban Hernández. Una vez presentado el proyecto, cuyas obras concluirán en otoño de 2004, los asistentes al acto se han trasladado a los terrenos del Jardín Botánico (en el Campus de Albacete) para plantar la primera encina de este espacio natural y descubrir un monolito con la placa inaugural .
Se trata de un proyecto de clara repercusión social en la región para la conservación del medio ambiente natural. Ésta cualidad, junto a su carácter investigador y generador de empleo, fue destacada por el presidente de la Asociación Española de Jardines Botánicos, quien destacó el aire pacificador que se respirará en este espacio y dijo que “además de transmitir conocimiento y contribuir al progreso económico y social de la ciudad y la región, puede ser un rincón para la paz y la tranquilidad”.
El director de la Escuela de Agrónomos, Francisco Montero, destacó que “éste es un buen momento para iniciar la construcción del Jardín, ahora que se cumplen 25 años del nacimiento de la Escuela”. Montero también subrayó que “ha de ser un lugar de encuentro para el estudio, el trabajo y la comunidad vegetal”. Diego Peris, por su parte, , describió el futuro Jardín como “una parte más de la ciudad” y añadió que, en sus casi 70.000 m2, acogerá espacios ajardinados, dos edificios, una gran zona natural, un invernadero o dos lagos. El arquitecto explicó que “se ha jugado con la topografía para que, desde las zonas superiores, puedan contemplarse paisajes situados a 8 metros por debajo, con el fin de tener una amplia riqueza de perspectivas”.
Herbarios, laboratorios, invernaderos para plantas de climas cálidos, espacios ajardinados,... el Jardín Botánico será un museo vivo del mundo vegetal que albergará encinas, pinares, sabinares, olmos, melias, cereales, frutales o magnolias, por citar sólo algunos de los vegetales que habitarán en él. Precisamente, sobre la importancia de las especies y la conservación de la naturaleza, el alcalde de la ciudad, Manuel Pérez Castell, dijo que “no tiene conocimiento aquel que no cuida su mundo” y destacó la equiparación que logra Albacete con las 13 ciudades españolas, y las casi 500 europeas, que ya cuentan con un espacio similar.
Intervino el rector, Luis Arroyo, hablando de lo “ambicioso” de este proyecto, dijo, “no sólo para la Universidad, sino para la ciudad y la región entera”. El rector también aludió a la importancia de este Jardín para la Escuela de Ingenieros Agrónomos de la UCLM, “cuya imbricación en la sociedad, gracias a sus estudios y trabajos, es muy importante”, añadió. Luis Arroyo destacó la transmisión de ocio, cultura, ciencia y tecnología que logrará este proyecto y, sobre todo, dijo que “el Jardín reforzará ese peso que necesitamos en el debate sobre el agua”. Por último, el consejero de Ciencia y Tecnología cerró el acto aludiendo al Jardín como uno más de los proyectos y realidades que enriquecen a Albacete y Castilla-La Mancha y que, añadió, “están perfectamente integrados en la Universidad”.
Con una inversión estimada de 4’2 millones de euros y un plazo de ejecución previsto de 18 meses, el Jardín Botánico es fruto de la colaboración institucional entre la Junta de Comunidades (que financia el proyecto), el Ayuntamiento de Albacete (que cede las 7 hectáreas de terreno necesario) y la Universidad de Castilla-La Mancha (autora del proyecto junto al Jardín Botánico de Córdoba).