La profesora del Centro de Estudios Universitarios (CEU) de Talavera de la Reina Vicenta Rodríguez ha publicado el estudio "Adolescentes y jóvenes de Castilla-la Mancha ante la violencia de género en las relaciones de pareja", promovido por el Instituto de la Mujer y presentado recientemente por su directora, Ángela Sanroma.
En este trabajo de investigación, la profesora Rodríguez ha trabajado con una muestra de 1.064 jóvenes de la región con una media de 15,96 años y de ámbito rural y urbano, en un 95 por ciento de nacionalidad española y en un 5 por ciento de otras procedencias.
Los resultados ponen de manifiesto que, a pesar de que estos adolescentes han nacido en una democracia, siguen adquiriendo una educación no igualitaria que se refleja en su concepción del amor y de las relaciones y que pueden dar lugar a comportamientos de dominación en el caso de los chicos y de sumisión en el caso de las chicas.
Según explicó la autora durante la presentación, siguen existiendo carencias en el aprendizaje de la igualdad en el entorno familiar, puesto que los modelos referenciales de madre y padre siguen "legitimando al varón para el ámbito público y legitimando a las mujeres para el ámbito privado".
Vicenta Rodríguez insistió en que "el mito del amor romántico" está dificultando las relaciones afectivas entre las parejas jóvenes, puesto que las chicas al ser preguntadas por su "pareja ideal" contestan que "buscan una pareja que les proteja y las cuide", lo cual sitúa a las mujeres en una posición de "mayor vulnerabilidad y fragilidad".
Tanto los chicos como las chicas consultados afirman en un 55 por ciento que "el amor lo puede todo" y se muestran partidarios de que "los celos son un modo de demostrar amor". El estudio explica que estas afirmaciones nos llevan a "minimizar los actos agresivos recibidos en la pareja".
Con frecuencia, los y las jóvenes no perciben como abuso algunas situaciones de control del chico hacia la chica, o lo consideran "una manera de demostrar amor". Así, el 64,1 por ciento se muestra de acuerdo con que "cuando un chico quiere mucho a una chica, es normal que quiera saber dónde está, con quién o qué hace".
Respecto a la concepción que tiene la adolescencia y la juventud de la región en cuanto a la violencia de género, destaca que la mayoría entiende que la agresión del varón es un delito, aunque siguen persistiendo ideas erróneas en torno a las causas de la violencia.
Gran parte de los chicos y chicas consideran que los malos tratos a mujeres se deben a una enfermedad o adicción al alcohol del agresor o que es la mujer la que provoca y es la responsable. De este modo, justifican y minimizan la violencia o hacen responsable a la mujer de su sufrimiento, mientras que dejan al varón exento de toda responsabilidad. Además, en buena medida apelan a la privacidad del fenómeno para no intervenir, para mantenerlo en silencio y, por tanto, no buscar ayuda.
Todas estas conclusiones y otras de interés se encuentran en el estudio completo que puede descargarse de la web del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha.
Toledo, 7 de mayo de 2010