Según han explicado el profesor de Física Aplicada de la Escuela Superior de Ingeniería Informática de Albacete, Enrique Arribas, este trabajo está orientado a dar respuestas a la sociedad ante el incremento que ha experimentado la contaminación debida a los campos electromagnéticos que producen la telefonía móvil, inalámbrica, la radio y la televisión o las redes inalámbricas (WIFI) a través de sus bandas de frecuencia.
"Es un campo en el que se ha investigado poco y no se conoce con detalle el espectro de la radiación a la que está sometida la población, de ahí la importancia de este estudio que por primera vez se hace en una ciudad española", ha manifestado el profesor Arribas que junto a los profesores de la Facultad de Medicina de Albacete, Alberto Nájera y José Manuel Villalba Montoya, conforman el grupo de investigación de RF que ya ha comenzado a desarrollar este proyecto de investigación interdisciplinar realizado desde un enfoque integral.
Según ha explicado Arribas, los voluntarios portarán durante un día o una semana un dispositivo (dosímetro) que registra la intensidad de las diferentes radiofrecuencias a las que se van exponiendo. Hasta el momento disponen de dos medidores y esperan contar con cuatro. De los 180 voluntarios apuntados, ya se han realizado mediciones con 22 de ellos que han portado el aparato durante 24 horas. Además llevan un GPS para ver la trayectoria que han tenido en Albacete y comprobar las dosis que han recibido en los lugares por donde han pasado.
Si se observara que en algún lugar de la ciudad la dosis recibida es superior al máximo legalmente permitido se tomarían las medidas oportunas, "hasta ahora, para la tranquilidad de los ciudadanos, estamos viendo que las emisiones que hemos detectado en la ciudad están mil veces por debajo del valor permitido", ha subrayado Enrique Arribas para quien, entre otros aspectos preventivos, sería muy interesante que en una comunidad de vecinos que tienen todos WIFI llegaran al acuerdo de apagarlo por la noche, aquellos que no tengan la necesidad de usarlo, evitando de esa manera el tráfico de ondas electromagnéticas durante el sueño.
A diferencia de otros trabajos similares que se han hecho en dos ciudades europeas en los que se medía cada minuto y medio, en este estudio el aparato lo hace cada diez segundos con lo que recoge nueve veces más de datos. Tras las mediciones de la primera veintena de voluntarios, se han registrado cerca de 3 millones de datos que, junto al resto que se irán acumulando, se analizarán aplicando los métodos estadísticos adecuados.
Los voluntarios, mayores de 18 años y de ambos sexos, harán vida corriente mientras porten el medidor. Al menos 33 voluntarios repetirán las medidas con el fin de determinar diferencias temporales. Se espera que colaboren en esta iniciativa hasta 300 personas. Aquellos interesados en participar o que estén preocupados por este tema, se pueden informar a través de la dirección aurl.es/62c o de un buscador introduciendo los términos "Proyecto Antenas Albacete".
La principal aplicación de los resultados que se publicarán una vez finalizado el estudio dentro de tres años, será poder evaluar posibles efectos sobre la salud. Al no existir muchos estudios similares, Alberto Nájera explicó las posibilidades que se abren de colaboración con empresas, "al tratarse de un campo floreciente esperamos la implicación de las empresas privadas que puedan ver en este tipo de observaciones y estudios, un nuevo área de negocio e innovación tecnológica".
En el acto de presentación, también han intervenido la directora académica del Vicerrectorado de Investigación, Mercedes Sanz, el decano de la Facultad de Medicina, José Martínez, y el director de Cajasol de Castilla-La Mancha, Enrique Pantín Calvino que mostró el interés de la entidad financiera en participar en este proyecto de investigación para lo cual ha suscrito un convenio de colaboración con la Universidad regional.
Gabinete de Comunicación UCLM, Albacete 13 diciembre de 2010