Han comenzado en el Campus de Toledo las VI Jornadas de Alimentación, Despensa y Salud de la UCLM, cuyo programa abordará, entre otros aspectos, los fundamentos de una adecuada alimentación y los beneficios de la despensa mediterránea en general y de los alimentos y productos de Castilla-La Mancha en particular, de cara a la salud y la prevención del sobrepeso y la obesidad. En el acto inaugural intervinieron la vicerrectora del Campus de Toledo, Evangelina Aranda; el director general de Producción Agropecuaria de la Consejería de Agricultura, Javier Nicolás; el director de las Jornadas, Antonio Mateos, y el cocinero toledano Adolfo Muñoz.
Las Jornadas tienen por objeto ofrecer respuestas a las inquietudes y problemas más habituales planteados en torno a la alimentación saludable, la gastronomía, los restaurantes y otros campos relacionados, constituyendo un núcleo de intercambio de conocimientos y experiencias. Además, el programa proporcionará a los más de 150 participantes herramientas para mejorar la alimentación de los jóvenes y corregir los malos hábitos alimentarios.
“En su sexta edición, las jornadas pretenden seguir concienciando a los estudiantes universitarios sobre la importancia de la alimentación saludable, dándoles a entender que comer sano no es sinónimo de comer cosas aburridas o sin sabor; al contrario, es descubrir nuevos sabores a través de alimentos y productos en los que apenas se detienen habitualmente y que son propios de nuestra despensa”, afirma el profesor Mateos.
“Resulta igualmente prioritario que conozcan más y mejor los alimentos de nuestra Comunidad Autónoma, desconocidos a menudo por parte del público e infravalorados en otras ocasiones: aceites, quesos, productos de caza, conservas y vinos, elaborados todos ellos por importantes empresas agroalimentarias, serán degustados en las jornadas”, prosigue.
En este sentido, el profesor señala la importante labor de muchas de estas empresas, que patrocinan las Jornadas y que ponen en el mercado productos de muy buena calidad. “También es fundamental que los participantes reciban mensajes claros sobre lo que es comer bien y qué es la buena comida y de ahí la presencia, en la última sesión, de cocineros y de críticos gastronómicos que cumplen un papel muy relevante de divulgación”, indica.