Ya ha sido publicado el cuarto Boletín del Banco de Recursos Genéticos de Animales Domésticos Amenazados de Castilla-La Mancha. Este proyecto, con sede en la UCLM y en el Centro Regional de Selección y Reproducción Animal –CERSYRA- de la Junta de Comunidades, ha centrado su nuevo número en la ampliación del convenio para la creación del banco de semen de la cabra blanca celtibérica, un ejemplar que se encuentra en el suroeste de la provincia de Albacete.
Entre los trabajos que se llevan a cabo para la preservación de la raza, se encuentra la recogida de semen de machos mediante electroeyaculación, técnica que no supone daño alguno para los animales y que se usa por las peculiares características de explotación de la raza.
La cabra blanca celtibérica aparece en este Boletín trimestral como una variedad en peligro de extinción. En la actualidad existen únicamente 3.200 animales de esta raza, que comprende animales de perfil recto y proporciones medias con capa uniforme de color blanco mate. Su producción principal es el “cabrito serrano”, con una media de 1,5 cabritos por cabra al año.
La edición de estos boletines es parte del trabajo que desarrolla el Grupo de Biología de la Reproducción de la Universidad de Castilla-La Mancha y el CERSYRA. Un proyecto financiado por la Consejería de Agricultura para la creación de un Banco de Recursos Genéticos que permita conservar las razas de animales domésticos amenazados en Castilla-La Mancha.
Los bancos de recursos genéticos resultan muy útiles para ayudar a la conservación de nuestras razas y variedades de animales, ya que permiten conservar la variabilidad genética y posibilitan el manejo genético de los recursos ganaderos. En estos bancos se conserva semen, ovocitos y embriones congelados que pueden ser utilizados durante muchos años. Además, su existencia permite ahorro económico y un intercambio de material genético sin riesgos sanitarios asociados.
Constituido en 1995, el grupo de Biología de la Reproducción de la Universidad de Castilla-La Mancha viene desarrollando su actividad en la mejora genética, la reproducción, y la conservación de varias especies de mamíferos que han sufrido una disminución de ejemplares próxima a la extinción. Esta merma puede ser debida a la introducción de material genético foráneo, cambios en la demanda, o la degradación de los ecosistemas, entre otras razones.
Albacete, 5 de octubre de 2006