El III Coloquio Hispano-Ruso, que desde el pasado martes, día 23, se viene celebrando en Madrid bajo el título “Frontera y Comunicación” concluye este jueves, en el campus de Toledo de la Universidad de Castilla-La Mancha.
En este encuentro, organizado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas con la colaboración del Ministerio de Educación y Cultura, la Universidad de Castilla-La Mancha, a través de su Vicerrectorado de Cooperación Cultural, y la Universidad Complutense, participan 20 profesores, la mitad españoles y la otra mitad eslavos.
La jornada de mañana, que tendrá como sede la Sala de Prensa del antiguo Convento de San Pedro Mártir (Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales), comenzará a las 10.30 horas con la intervención de Mihai Muraru, de la Universidad de Bucarest que hablará de la Biblia de Nóvgorod y la Políglota complutense.
Los testimonios españoles de las guerras ruso-turcas, el marco histórico y geográfico de las relaciones hispano-rusas y la literatura española del siglo XX en Rusia, completarán el programa organizado por la mañana. Estos temas serán tratados por los profesores de la Universidad Complutense de Madrid, Miguel A. De Bunes y Angel Encinas y Kiril Korkonossenko, de la Universidad de San Petesburgo.
Los viajes se convertirán en el eje en torno al cual girarán el resto de intervenciones. A las 16.00 horas abrirá la sesión la profesora Eugenia Popeanga, de la Universidad Complutense con la ponencia Un viajero español del siglo XVII en Moscú. El viaje de Jan Sawicki (1831-1911) será el tema escogido por Fernando Presa, también de la Universidad Complutense. Tras una pausa, tendrá lugar la conferencia Rusia y España a través de las cartas de los viajeros. Valera y Botkin, a cargo de la profesora de la Universidad de Bucarest, Svetlana Maliávina, para, finalmente, intervenir el profesor de la UCLM y Vicerrector de Cooperación Cultural Miguel Cortés, que reflexionará sobre los viajeros españoles y el arte ruso antiguo.
La colaboración de la Universidad de Castilla-La Mancha en el III Coloquio Hispano-Ruso es de gran importancia ya que abre posibles vías de colaboración tanto docente como investigadora pues no hay que olvidar, por ejemplo, el interés que para Rusia tiene La Mancha o Cervantes como ha quedado patente a través del cine, documentales, la literatura...