La obra del fotógrafo de Albacete, Luis Escobar (1887) llega ahora al campus de Toledo, gracias al Centro de Estudios de Castilla-La Mancha de la UCLM. Hasta el próximo 30 de marzo, la Sala de Música de San Pedro Mártir (Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales) abre sus puertas para mostrar la obra de uno de los más importantes fotógrafos populares de nuestro país en su tiempo.
Esta exposición, cuyo Comisario es el prestigioso Fotohistoriador Publio Mondejar, reúne 77 fotografías, de las que la mitad son positivos de época realizados por el propio fotógrafo mediante contactos directos de las placas de cristal. El resto son copias de gran formato realizadas a partir de los negativos originales por el fotógrafo Juan Manuel Castro Prietol. Además se ha editado un catálogo realizado Lunwerg Editores donde se ofrece la totalidad de las fotografías, además de decenas de elementos iconográficos, un documentado texto de Publio López Mondéjar y exhaustivos índices cronológicos y bibliográficos.
Luis Escobar nació en Villalgordo del Júcar, en 1920 se estableció en Albacete, iniciando pronto una incesante actividad como fotógrafo ambulante, que le llevó a recorrer durante casi cuarenta años los pueblos de La Mancha. Esta condición junto a su capacidad para reflejar fielmente la realidad que presentaba ante el ocular de sus cámaras, sus dotes para el reportaje y la composición de grupos, su cercanía con las gentes que retrató, y su instinto para convertir sus fotografías en relevantes documentos gráficos sobre la vida íntima y pública de la región, hacen de su obra un deslumbrante fresco social de la España de su tiempo.
En su apasionado afán por inventariar todos los órdenes de la vida popular, Escobar mostró una inagotable tenacidad, que le permitió realizar una formidable crónica gráfica y sentimental de la comarca, en un tiempo memorable ya extinguido. El fotógrafo, que nunca se resignó a practicar las faenas rutinarias de sus compañeros de oficio, pronto supo encontrar el modo de reflejar los acontecimientos más sobresalientes de la comarca, ya fuesen hechos luctuosos, inauguraciones, celebraciones religiosas, romerías, corridas de toros o actos políticos. Realizó así cientos de imágenes que son otros tantos documentos admirables de la vida popular de la España de su tiempo. En este campo realizó Escobar algunas de sus mejores fotografías, como la de la Agrupación Socialista de Villalgordo del Júcar (1925), las prostitutas del Alto de la Villa (1928), Juan de la Cierva presentando su autogiro (1926), los vendedores ambulantes de navajas (1923) o las imágenes de la vida cotidiana de Albacete durante la Guerra Civil.
Paralelamente a esta muestra, que ya ha recorrido otros campus, se ha organizado unas Jornadas que se celebrarán la próxima semana y que contarán con la presencia de destacados fotohistoriadores.