El grafeno es un material ligero, flexible, económico y actúa como un excelente conductor. Su resistencia es 200 veces superior al acero, una cualidad que, unida a las anteriores, lo han convertido en el previsible sustituto del silicio, en el material del futuro. Un grupo de investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), liderados por el profesor José Luis Valverde Palomino, colaboran con la empresa española Graphenano para optimizar la fabricación de este material.
Los doctores Konstantin Novoselov y Andre Geim obtuvieron el Nobel de Física en 2010 por el descubrimiento del grafeno, un material que ha revolucionado la ciencia y la industria en todo el mundo por su enorme potencialidad: es transparente, muy resistente, impermeable, flexible, económico y un excelente conductor de electricidad.
El grafeno se emplea en la fabricación de componentes electrónicos, pantallas flexibles y transparentes, en la industria aeronáutica, la automoción e, incluso en la medicina. Puede aplicarse casi a cualquier ámbito, lo que justifica el interés de corporaciones como la española Graphenano, dirigida por jóvenes emprendedores y en la que colabora muy activamente el grupo de investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) que lidera el profesor José Luis Valverde Palomino.
Este investigador y su equipo del Laboratorio de Catálisis y Materiales del Departamento de Ingeniería Química comenzaron a trabajar con la empresa con un contrato suscrito al amparo del artículo 83 de la LOU “con el desafío de sintetizar el grafeno no sólo a escala de laboratorio sino industrial”, explica el profesor Valverde, quien asegura que “nos resultó sencillo llevar el proceso a la práctica puesto que ya acumulábamos experiencia previa en la síntesis de estructuras parecidas”.
Gracias al trabajo de los investigadores de la UCLM, la empresa ha implementado un proceso sostenible, ecológico e innovador de fabricación que permite elaborar láminas de hasta 2.500 centímetros cuadrados por carga, de modo que cubrirá un alto volumen de pedidos en un espacio muy corto de tiempo.
Son muchas las multinacionales extranjeras que ya se han interesado por la producción de Graphenano. No en vano, los expertos auguran un futuro muy prometedor para el material en industrias punteras, como la de los semiconductores, pues permitirá fabricar ordenadores mucho más rápidos y que consuman menos energía mediante el desarrollo de microprocesadores con transistores de grafeno.
En el campo de las comunicaciones y la energía, también se percibe una fuerte apuesta por el grafeno. Recientemente se ha demostrado que electrodos basados en este material permiten fabricar baterías de móviles diez veces más duraderas.
Gabinete Comunicación UCLM. Ciudad Real, 20 de julio de 2012