La vicerrectora de Docencia y Relaciones Internacionales, Fátima Guadamillas, y el alcalde de Toledo, Emiliano García Page, han presentado hoy la restauración de las fachadas noroeste y noreste del antiguo Palacio del Cardenal Lorenzana, cofinanciada por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), el Ministerio de Cultura y el Consorcio de Toledo. Las obras, ejecutadas a lo largo de los últimos once meses, han contado con un presupuesto de alrededor de 450.000 euros.
El proyecto de rehabilitación, redactado por el arquitecto Manuel Serrano Marzo, ha recuperado tanto el revoco original, que data de 1804 y se aprecia en un tramo de la fachada noreste, como el ejecutado en 1874 en la fachada posterior del edificio.
Así lo indicó el gerente del Consorcio, Manuel Santolaya, durante la presentación de la nueva imagen del edificio, inscrita en un conjunto de acciones más amplias encaminadas a recuperar la figura de Ignacio Haan, arquitecto proyectista del inmueble en el siglo XVIII. El gerente explicó que en 1874, por desaparición del revoco original, se realizó uno nuevo “imitando sillares y con una tonalidad diferente a la que se estaba usando entonces en Toledo”. Este es el que puede apreciarse hoy desde la calle Instituto.
La vicerrectora mostró su satisfacción por la intervención realizada en un edificio “que siempre ha sido universitario” y subrayó que ésta constituye un ejemplo de colaboración “fluida” entre administraciones.
Por su parte el alcalde, que apostó por la “conservación, mejora e incremento” del patrimonio monumental, indicó que la restauración de las fachadas de Lorenzana responde a un proceso de “dignificación del entorno” y obedece a razones “sociales, morales, prácticas y económicas”. Además, señaló la singularidad del edificio, que calificó de “joya arquitectónica”, y su función como “centro de la actividad universitaria y generadora de movimiento”.
El Palacio de Lorenzana
La tradición universitaria de Toledo se remonta a la transformación, en 1530, del Colegio de Santa Catalina en Universidad. El edificio que albergó en origen a la institución fue diezmado progresivamente por la precariedad y las guerras, de modo que las enseñanzas se trasladaron a otros inmuebles del Casco Histórico hasta que en 1795, bajo la protección del Cardenal Lorenzana, el arquitecto alicantino Ignacio Haan comenzó a construir la nueva sede de la Universidad de Toledo sobre el solar donde, desde mediados del siglo XVI, se ubicaban las casas de la Inquisición.
Cuatro años después concluían las obras y la Universidad empezó a funcionar en su nueva sede, el Palacio de estilo neoclásico que en la actualidad acoge el Vicerrectorado de Docencia y Relaciones Internacionales de la UCLM. Además de tener usos administrativos, el Palacio de Lorenzana, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), se utiliza en la actualidad para fines docentes de la Universidad de Mayores “José Saramago” y de investigación y documentación, a través del Centro de Estudios Europeos y del Centro de Estudios de consumo.
La sede del Vicerrectorado combina estos usos con el refuerzo de la programación científica y cultural abierta a la ciudad de Toledo. Entre otras actividades programadas, el edificio acoge el ciclo de conferencias desarrollado cada primavera a iniciativa de la Universidad de Mayores “José Saramago” bajo el título genérico de “Los martes de Lorenzana” o los promovidos por la Facultad de Humanidades dentro de sus seminarios estacionales.
Gabinete de Comunicación UCLM. Toledo, 19 de abril de 2012