La catedrática de Derecho Constitucional y miembro del Comité Internacional de Bioética de la UNESCO, Yolanda Gómez, ha participado como ponente en el III Máster en Derecho Sanitario y Bioética que imparte la Facultad de Derecho de Albacete. La profesora ha tratado los aspectos jurídico-constitucionales de las técnicas de reproducción asistida, cuya normativa ha estado en permanente modificación en los últimos años y se ha plasmado recientemente en la polémica Ley 14/2006 que, entre otras cosas, permite la selección genética de embriones y prohíbe la clonación reproductiva y las madres de alquiler. Con esta nueva Ley, al igual que ocurrió con la del año 1988, “España se sitúa entre los primeros países del mundo en el plano legislativo” afirmó.
La profesora comentó que la nueva ley mejora determinados aspectos de la anterior pero, a su juicio, debería haberse reformado en lo relativo al anonimato absoluto sobre el donante, pues va en detrimento del derecho del hijo a conocer su origen genético. Por otra parte, la profesora valora positivamente el aspecto relativo a la regulación de la maternidad post mortem, donde se ha aumentado de seis a doce meses el tiempo de que dispone una mujer para la utilización del material genético del marido premuerto. Sobre otro aspecto polémico, el mantenimiento de la prohibición de la llamada maternidad de alquiler, considera que es totalmente conveniente, pues “de alguna forma, se utilizaría a la mujer como un mero útero para gestar”.
Yolanda Gómez colabora con la Facultad de Derecho de Albacete desde el comienzo del Máster. La profesora es la única española entre los 36 expertos que componen el Comité Internacional de Bioética de la UNESCO, un comité que, como ella afirma “tiene una composición muy plural, pues la propia Institución establece unas reglas que permiten la máxima representación de todos los Estados”. En cuanto a la disparidad de criterios sobre temas relativos a la biomedicina y los derechos humanos, asegura que “es muy frecuente, aunque el hecho de que los miembros del Comité sean especialistas en sus respectivas materias hace que la discusiones se desarrollen en un contexto técnico”. Por otro lado, comenta, “el carácter deliberativo del Comité, donde todos los temas se estudian desde diversas posiciones ideológicas y científicas, ayuda extraordinariamente a la consecución del consenso, y lo más importante de los documentos de la UNESCO es, precisamente, que al establecer líneas generales y principios básicos sobre los problemas, permiten que muy diversos países y culturas puedan hacerlos suyos y aplicarlos en el marco de sus respectivos sistemas legales y sociales”.
En cuanto a los beneficios de la declaración universal de la UNESCO sobre las normas universales de bioética, Yolanda Gómez afirma que “fue un paso sin precedentes, un documento absolutamente novedoso en el marco internacional, que muestra la ineludible vinculación de todos los problemas derivados de la aplicación de las nuevas biotecnologías con la defensa de los Derechos Humanos”. Además, asegura, con ello se cumple con uno de los objetivos de la propia UNESCO como es la defensa de los derechos humanos como requisito para la paz mundial. La profesora estima que esta Declaración deberá tener una influencia muy notable en muy diferentes países y permitirá afianzar la garantía de las libertades individuales en muchas sociedades.
Dicha Declaración se centra en el ser humano y en su dignidad, algo bastante complejo de explicar que Yolanda Gómez define así “podemos afirmar que la dignidad
es una especial cualidad del ser humano que le hace diferente a otras realidades y que obliga, por tanto, a otorgarle un trato y a reconocer unos derechos que le son propios. El concepto de dignidad no puede desvincularse hoy día del reconocimiento de la libertad de cada persona. En gran medida y especialmente en los problemas biomédicos, la dignidad está profundamente vinculada a la libertad individual y, en todo caso, obliga a permitir que cada ser humano -siempre que se encuentre en el pleno uso de sus competencias mentales- pueda decidir sobre su vida y sus circunstancias más íntimas”.

Ante los grandes retos de la bioética, pendiente de las transformaciones sociales que conlleva el desarrollo científico y tecnológico, la profesora asevera que “los avances biotecnológicos resultan, por un lado extraordinariamente importantes para la sociedad actual pero, por otro, presentan riesgos innegables para la garantía de la dignidad, igualdad y libertad de los seres humanos”. No obstante, estima que el camino no es el del miedo, sino la reflexión sosegada que permita adoptar las normas legales que en cada momento posibiliten la mejor garantía y tutela de los derechos de las personas.
Finalización de la III Edición del Máster
El próximo mes de diciembre finalizará la presente edición del máster, que ofrece un espacio de reflexión sobre cuestiones jurídicas sanitarias ante los grandes avances de las ciencias biomédicas. Un nutrido grupo de profesores universitarios y expertos de la magistratura, la administración sanitaria y las instituciones médicas, abordan en él cuestiones como la organización de los servicios sanitarios, los problemas jurídicos y éticos que plantea la eutanasia, los derechos de los usuarios, la manipulación e información genética, la reproducción asistida o los trasplantes, entre otros temas.
Este postgrado, que cuenta con el apoyo de la Consejería de Sanidad, la Fundación Mapfre Medicina, Caja Castilla-La Mancha y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Albacete, está destinado a titulados universitarios y a profesionales del derecho, la sanidad y el aseguramiento médico. Para la próxima edición, el plazo de preinscripción está abierto hasta el 15 de diciembre y, como ha ocurrido en esta última, los alumnos tendrán la oportunidad de cursarlo en cualquiera de sus dos modalidades; presencial o a través de Internet.