Esta mañana han comenzado en el Campus de Toledo las XI Jornadas Técnicas de la Sociedad Española de Agricultura Ecológica (SEAE), que reunirán durante los próximos días a especialistas en la gestión de agrosistemas de secano para establecer sus posibilidades futuras en el campo español. En la sesión inaugural, presidida por Evangelina Aranda, vicerrectora del Campus, participaron José Luis Porcuna, presidente de la SEAE; Francisco Javier Nicolás, director general de Desarrollo Rural de la Consejería de Agricultura de la JCCM; Eladio Luján, vicepresidente primero de la Diputación Provincial de Toledo, y Federico Fernández, decano de la Facultad de Ciencias del Medio Ambiente de Toledo.
Científicos, agricultores, ganaderos, representantes de las administraciones públicas, agentes sociales y profesores universitarios debatirán hasta el próximo sábado en el Campus de Toledo sobre las posibilidades del cultivo de secano en España, en unas jornadas promovidas por la UCLM y la SEAE en colaboración con la JCCM y la Diputación de Toledo, entre otras instituciones. Según afirmó durante la sesión inaugural José Luis Porcuna, presidente de la SEAE, “las jornadas constituyen el mejor foro para dar a conocer a las administraciones públicas las opiniones de especialistas independientes, imaginativos, reflexivos y comprometidos, especialmente en un momento de debate sobre la agricultura de secano”.
En Castilla-La Mancha, donde existen en la actualidad 955 operadores y 38.000 Ha. dedicados al secano, tal y como manifestó Francisco Javier Nicolás, director general de Desarrollo Rural de la Consejería de Agricultura de la JCCM, el incremento de este tipo de cultivo ha sido notable desde 1996, año en que comenzó a apoyarlo el gobierno regional. “La agricultura ecológica es una importante alternativa a la tradicional, especialmente en un momento en el que existe gran preocupación social por el medio ambiente”, afirmó Nicolás. Para el director, que anunció la aprobación por parte del ejecutivo castellano-manchego de un nuevo plan estratégico de apoyo a este tipo de agricultura, el principal problema es que el consumidor aún no está suficientemente concienciado sobre la diferenciación que suponen la agricultura y la ganadería ecológica. “Tenemos que hacer un esfuerzo por divulgar sus ventajas, lo que pasa por una cuerdo con el comercio para incrementar el consumo y con él la producción”, indicó.
Como muestra de su implicación en el tejido productivo de la región, la UCLM no permanece ajena a la problemática del ecocultivo en secano. Así lo explicó Evangelina Aranda, vicerrectora del Campus de Toledo, que dio cuenta de los avances investigadores realizados al respecto en las facultades de Ciencias del Medio Ambiente de Toledo y Ciencias Químicas de Ciudad Real, así como en la Escuela de Ingenieros Agrónomos de Albacete. “La transmisión del conocimiento adquirido mediante la investigación se produce mediante la docencia. En la actualidad, la UCLM imparte un postgrado centrado en agricultura ecológica, en Albacete, y otro sobre desarrollo rural, con un módulo específico sobre este tipo de agricultura”, añadió. Para concluir su intervención, la vicerrectora señaló la oportunidad de la temática y destacó el enfoque multidisciplinar de las jornadas, ya que “el programa se ha planteado desde el punto de vista del desarrollo sostenible, pero también desde la economía, el papel de los defensores públicos y la preocupación social”.
Ponencia inaugural
Carlos Vizuete, profesor de Historia Moderna en la Facultad de Humanidades de Toledo, pronunció la ponencia inaugural, titulada “El mundo agrario en la época del Quijote”. Durante su intervención, Vizuete rastreó las referencias agrarias la más popular de las obras cervantinas, señalando que su autor “ni era historiador, ni geógrafo, ni sociólogo, ni agricultor”. El profesor profundizó sobre el mundo agrario en la época en que Cervantes escribió El Quijote, un momento “de depresión agraria sin disparidades regionales”, especialmente durante la primera mitad de la centuria. “El Quijote es una novela cuyos episodios se desarrollan en un paisaje en su mayor parte hoy desaparecido, víctima del largo proceso de depresión y ajuste por el que atravesó el mundo agrario en el siglo XVII”, concluyó.