Toledo, (23/01/2003).- Luis Arroyo, rector de la Universidad de Castilla-La Mancha, y Emilio Botín, presidente del Grupo Santander, han firmado hoy un convenio de colaboración que prevé una dotación económica de 360.020 euros anuales para la Fundación General de la Universidad. Estos fondos se destinarán, entre otros proyectos, a programas de investigación del Instituto de Recursos Cinegéticos, a la Escuela de Traductores de Toledo, a la creación de la Cátedra Miguel de Cervantes y al Parque Científico y Tecnológico de Albacete. El nuevo convenio refuerza y amplía el establecido en 1998 en un 40 por ciento.

El acuerdo entre ambas instituciones, con una vigencia de cuatro años, tiene como objeto general elevar la oferta y la calidad de los servicios prestados a la comunidad universitaria, con el desarrollo de proyectos que contribuyan a la excelencia de la actividad docente e investigadora, y a la eficiencia de la gestión académica. El acto de la firma ha tenido lugar en la Biblioteca del Palacio de Sabatini, de la antigua Fábrica de Armas de Toledo, y ha contado también con la asistencia del equipo rectoral y, por parte del banco, de Enrique García Candelas, director general de la División de Banca Comercial en España, de José Antonio Villasante, director del Área Universidades, y de Julián Párraga, director territorial de Castilla-La Mancha.
El nuevo convenio establece específicamente los proyectos académicos, sugeridos por la universidad, en los que colaborará el Santander Central Hispano. Entre otros, los trabajos sobre caza y recursos naturales que desarrolla el Instituto Universitario de Investigación sobre Recursos Cinegéticos; la creación de la cátedra de Miguel de Cervantes, coincidiendo con el cuarto centenario de la publicación de Don Quijote de la Mancha; las actividades de la Escuela de Traductores de Toledo, y los programas de vinculación a la universidad de graduados y antiguos alumnos.
El banco contribuirá, además, al desarrollo del Parque Científico y Tecnológico de Albacete y promoverá un programa de cooperación educativa que permita el acceso de los universitarios a prácticas profesionales remuneradas.

Colaboración tecnológica y operativa.
En el ámbito tecnológico, la Universidad y el banco desarrollarán nuevas aplicaciones del carné universitario inteligente que den soporte a gestiones académicas de alto valor añadido, como son la certificación electrónica o el control de accesos a ordenadores personales. El banco también ampliará los servicios que su red de cajeros 4B ofrece como canal complementario tanto para realizar operaciones económicas como para facilitar el acceso a información académica y universitaria.
Santander Central Hispano, por otro lado, ofrece a la Universidad de Castilla–La Mancha sus capacidades organizativas y tecnológicas en Internet. Esta disponibilidad incluye el refuerzo de la colaboración con Universia, un portal del que esta universidad es miembro de su Comisión Ejecutiva y su Consejo de Administración, así como el apoyo a los proyectos de enseñanza con sistemas no presenciales.
La comunidad universitaria castellano-manchega, compuesta por un colectivo de 1.224 profesores y 32.800 alumnos, dispondrá de una oferta específica de productos y servicios financieros, orientada a dar respuesta a sus necesidades a corto y medio plazo.


Toledo, 23 de enero de 2003