Sesenta y cinco estudiantes de la asignatura “Turismo y práctica deportiva” de la Facultad de Ciencias del Deporte de Toledo visitaron el campo de golf de Layos (Toledo) para iniciarse en la práctica de este juego, al tiempo que conocieron el impacto sociológico, económico y medioambiental que las instalaciones están teniendo en la región castellano-manchega. En su primera clase práctica, los alumnos aprendieron las nociones básicas de la técnica deportiva, así como el equipamiento y la terminología del juego y el perfil del jugador medio.
Según explica Ricardo Rodríguez, profesor de la asignatura, “en los últimos años esta modalidad deportiva ha pegado el estirón en Castilla-La Mancha, donde las seiscientas licencias del año 96 se han transformado en más de seis mil. También ha sido explosiva la construcción de campos de golf, cuyo número ya asciende a once”. El profesor opina que la facilidad en la progresión en la práctica de este deporte así como el contacto con el medio natural, la posibilidad de competición entre género y edad y las demandas psicológicas, hacen de este un juego una actividad gratificante con cada día mayor número de adeptos.
Por este motivo, la Facultad de Ciencias del Deporte de Toledo ha puesto en marcha esta iniciativa, con el fin de que sus alumnos se familiaricen con un deporte que puede abrir buenas expectativas profesionales una vez concluida la licenciatura. “Los hábitos de vida en el tiempo de ocio están en continuo cambio, las actividades participativas y activas tienen cada día mayor presencia en nuestras vidas. El ocio es eje conductor de gran parte de nuestra vida, saber dirigirlo hacia hábitos de vida saludable y divertida es actuar con inteligencia”, indica el Rodríguez.
El profesor señala además algunas de las ventajas que los campos de golf tienen en Castilla-La Mancha, como la revalorización de la imagen de la región, la lucha contra la estacionalidad del turismo, la generación de empleo o la renovación paisajística de zonas deforestadas.
Toledo, 13 de marzo de 2007