Quevedo y Cervantes compartieron algo más que una época. Ambos tuvieron muy presente el compromiso por la libertad y contra el totalitarismo en una época en la que España pagaba por sus anteriores errores políticos. Ahora la Universidad de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Villanueva de los Infantes unen sus fuerzas para situarlos frente a frente en el año del Centenario.
El vicerrector del Campus de Ciudad Real, Francisco Alía, acompañado del alcalde de Villanueva de los Infantes, Mariano Sabina y el profesor de la UCLM Felipe Pedraza han presentado esta mañana las IX Jornadas sobre Quevedo y su época, que tendrán lugar del 9 al 12 de agosto en la Hospedería Real de Quevedo de Villanueva de los Infantes.
Para Pedraza, director de las jornadas, desde su puesta en marcha “es un hito haber reunido en 9 años a los más destacados Quevedistas del mundo”, comenta el profesor de la UCLM, además “este año aun ha sido más complicado reunir el elenco de profesores porque necesitábamos expertos en Quevedo y Cervantes”.
En esta ocasión las jornadas se dedican a Cervantes “sin ser redundantes”, según Felipe Pedraza. Cuenta el especialista en el Siglo de Oro que Quevedo y Cervantes fueron dos críticos con los personajes y las instituciones de la época, pero siempre mantuvieron un respeto importante entre ellos. Quevedo influye en la obra de Cervantes, al menos en la creación de géneros breves, como los Entremeses y ocurre al revés en “La Jácara” o poema donde el delincuente glosa sus “azañas”, donde es Cervantes el que influye en las creaciones de Quevedo.
Para analizar los aspectos artísticos, históricos, políticos o literarios, se ha invitado a figuras de la investigación literaria española de la talla de Antonio de Rey Hazas, editor de la obra de Quevedo y Cervantes; José Montero, presidente de la Asociación de Cervantistas o la catedrática de la Universidad de Barcelona Rosa Navarro, es decir, los más destacados investigadores en la figura de Cervantes y, por supuesto, de Quevedo.
El vicerrector del Campus de Ciudad Real quiso aprovechar la ocasión para recordar la figura del recién fallecido Augusto Roa Bastos, autor de Yo, el Supremo, escritor exiliado de su Paraguay natal y hombre que dedicó toda su vida a la lucha por la libertad “lo que nos viene a demostrar que algunos autores son inmortales, prueba de ello son Cervantes o Quevedo y por ello seguimos recordándoles después de varios siglos”, subrayó Alía.
Ciudad Real, 27 de abril de 2005